Categoría: "REFLEXIONES"
DIOS NACE EN NUESTRA CASA COMÚN
Queridos amigos:
Cada mañana Dios se asomaba al balcón del cielo para ver su obra creada con y por amor… Pero un día al hacerlo y contemplar la “casa común de todos”, vio un mundo roto, peleas de unos con otros, divisiones…, le dio mucha pena y sintió compasión.
Le entraron ganas de llorar y lloró.
¿A QUÉ DIOS ESPERAMOS?
Queridos amigos:
A menudo gritamos a Dios cuando el sufrimiento nos golpea y nos hace llorar; cuando nuestra soledad o la de otras personas que conocemos se nos hace dura; cuando vemos a niños que siguen empuñando armas; cuando sabemos que hay muchos hombres, mujeres y niños destinados a morir de hambre o de enfermedades que tienen curación. Gritamos a Dios, le preguntamos y esperamos no sólo que nos responda, sino que venga Él mismo a resolver todas esas situaciones.
CREER EN EL RESUCITADO
Queridos amigos:
Después del camino recorrido en estas semanas que preceden a la gran fiesta de la Pascua, os envío unas letras para que juntos nos preparemos a vivir la fe en el Resucitado.
La fe no es un principio abstracto, no es algo teórico ni que exista en sí misma. La fe existe donde el hombre se arriesga a aceptar la verdad del anuncio del Reino de Dios. Se trata de una experiencia viva y, en cuanto tal, la vamos viviendo como un itinerario, desde la adhesión personal al Resucitado, hasta el compromiso con un mundo mejor, más fraterno y más bello.
CUARESMA: TIEMPO DE MISERICORDIA
Queridos amigos:
Cuando todavía resonaba el saludo de Jesús resucitado a sus discípulos en la tarde de Pascua: “Paz a vosotros” (Jn 20,19), el 11 de abril, víspera del II domingo de Pascua, el papa Francisco anunciaba al mundo entero un Jubileo Extraordinario de la Misericordia. Sin duda una gran noticia para la humanidad y para cada uno de nosotros.
Lo ha querido inaugurar y hacer vida concreta a partir de la fiesta de la Inmaculada Concepción de María, el pasado día 8 de diciembre; para que durante todo este año volvamos a redescubrir en quién creemos y cómo se extiende la mano amorosa de Dios sobre cada uno de nosotros. ¡Qué suerte tenemos en poder creer en el Dios de la misericordia!
VINO AL MUNDO
Queridos amigos:
Nos ha nacido un Salvador. Vino al mundo en una noche cerrada, en la que de pronto, una “claridad” envolvió con su resplandor a los pastores. La imagen es grandiosa, la noche queda iluminada. Sin embargo, los pastores “se llenan de temor”. No tienen miedo a las tinieblas, sino a la luz. Por eso el anuncio empieza con estas palabras: “No temáis”.
También en nuestros días nos puede suceder algo parecido. Preferimos vivir en tinieblas, nos da miedo la luz de Dios. No queremos vivir en la verdad. Pues mirad, quien no ponga en estos días más luz y verdad en su vida no celebrará la Navidad.