Categoría: "HOMILIAS"
HOMILÍA
Estamos en el tiempo de Pascua. Concretamente, en su tercer domingo. Un tiempo en el que vemos a Jesús que se va apareciendo a unos y a otros para llevarles al convencimiento de que realmente ha resucitado. ¡Ojalá que este hecho quedara grabado con fuerza en nuestros corazones! Creemos en Jesús, sí, pero en un Jesús que no quedó olvidado en un oscuro sepulcro de Palestina, sino que volvió a la vida para nunca más volver a morir, como garantía de nuestra propia resurrección.
HOMILÍA
Nos encontramos celebrando, con alegría, el segundo domingo de Pascua; también conocido como domingo de la Divina Misericordia. El gozo que nos trae el tiempo pascual está unido al perdón que Dios nos ofrece, a la misericordia que tanto podemos necesitar en muchos momentos de nuestra vida. Misericordia que recibimos y que estamos llamados también a ofrecer a los demás. No dejemos nunca de poner el corazón en la miseria, en la pobreza, en el dolor de nuestros hermanos. Eso es lo que significa, precisamente, la palabra misericordia.
HOMILÍA
Hace ocho días comenzábamos la Semana Santa haciendo memoria de aquella entrada solemne de Jesús en la ciudad de Jerusalén. A lo largo de estas jornadas, hemos recorrido los momentos de dolor, de sufrimiento, de muerte y de cruz que le rodearon. Ayer, por la noche, encendimos el Cirio Pascual y, en él, nuestras pequeñas velas y así nos sentimos iluminados y abiertos de nuevo a una esperanza que reaviva nuestra fe y nos fortalece en el amor.
HOMILÍA
Celebra hoy la Iglesia el llamado “Domingo de Ramos” en el que recordamos a un Jesús que va a emprender la aventura de sus últimos días que comienzan con su solemne entrada en la ciudad de Jerusalén. En aquella calle, por la que entra, hay una gran multitud que le aclama, hay mantos y ramos de olivo, hay un borriquillo que le lleva a caballo, hay niños entusiasmados que acompañan a sus padres, hay unos apóstoles asustados por el tumulto que se está armando y que no saben cómo acabará. Hay una palabra que hoy la seguimos proclamado: “Hosanna” que viene a manifestar una alegría incontenible.
HOMILÍA
Los textos evangélicos de estos últimos domingos de Cuaresma fueron utilizados por la Iglesia primitiva como catequesis para preparar a los que habían pedido recibir el Bautismo. El relato de la Samaritana presentaba a Jesús como el Agua Viva. El del Ciego de Nacimiento enseñaba que Jesús era la Luz. Y hoy, el episodio de la resurrección de Lázaro, nos muestra, a este mismo Jesús, como la Vida con mayúsculas. ¡Ojala que también para nosotros estos textos nos ayuden a ver a Jesús de la misma manera en vísperas de celebrar la Semana Santa!